Introducción Esta presentación, que he titulado 'Elogio de la lectura' es, por cierto y en primer lugar, un elogio de las palabras; un elogio de las palabras y un elogio de la voz: ellas están en nuestro origen y las buscamos siempre de nuevo, especialmente en nuestras experiencias de amor y amistad más significativas 1. Por eso, antes de entrar en los saberes y sabores que nos aguardan en la palabra escrita, en los primeros registros históricos, en la crónica, el gran ensayo y en el poema, en la novela y la carta de amor, en todos los libros de una biblioteca, en el papel volandero, en el diario de vida o el diario de viajes, quiero leer un anónimo poema, encontrado totalmente al azar. Es un poema religioso, de la tradición musulmana sufí y creo que puede ser entendido como una oración y como un poema de amor; dice así: Tu silencio me duele tanto como la vida, tanto como el tiempo. Tus palabras me sostienen tanto como la tierra, tanto como el cielo. La escritura y la lectura, como sabemos, son actividades humanas relativamente recientes si las consideramos históricamente, desde los ideogramas escritos en papiro y desde las diversas grafías en la piedra, en las tablillas de cera, en los rollos o volúmenes romanos hasta el establecimiento del códice como soporte de lectura hacia el siglo 4 D.C. y luego, desde el libro, el pliego suelto, el tabloide periódico y ahora también la página de Internet que nos devuelve al 1 Quiero recordar en este sentido el texto de Walt Whitman, Leaves of Grass/ Hojas de Hierba (Starting from Paumanok), sobre el que volveré al final de esta presentación: "…Have you practis'd so long to learn to read? Have you felt so proud to get at the meaning of poems? Stop this day and night with me and you shall possess the origin of all poems,/ you shall possess the good of the earth and sun, (there are millions of suns left,)/ You shall no longer take things at second or third hand, nor look/through the eyes of the dead, nor feed on the spectres in books/…" "¿Te ha costado tanto aprender a leer? ¿te enorgullece comprender el sentido de los poemas/?Quédate conmigo este día y esta noche y serás dueño del origen de todos los poemas,/Serás dueño de los bienes de la tierra y del sol (aún quedan millones de soles),/ Ya no recibirás de segunda o de tercera mano las cosas, ni mirarás/ por los ojos de los muertos, ni te alimentarás de los espectros de los libros/…(Selección, traducción y prólogo, J.L.Borges, Barcelona:Lumen 1991) p.22-25.
CITATION STYLE
Bernier, G., & Mutiz, Á. (2016). Elogio de la Lectura. Documentation et Bibliothèques, 48(1), 27. https://doi.org/10.7202/1030470ar
Mendeley helps you to discover research relevant for your work.