Las dunas litorales chilenas son formaciones geomorfológicas recientes, acrecentadas por la intervención antrópi- ca, y distribuidas principalmente entre Coquimbo y Chiloé. La flora y macrofauna que han colonizado las dunas es, en general, menos diversa que en las áreas aledañas, y no presenta adaptaciones morfológicas particulares, sino un mayor rango de tolerancia fisiológica a las condiciones de aridez imperante en esos microambientes. Por lo tanto, no existe una fauna propia de las dunas, con diferenciación específica o subespecífica. Tanto los vertebrados autóctonos como los introducidos o migratorios han colonizado las dunas costeras. Para los vertebrados que perciben el ambiente como de grano fino, con extensos ámbitos de hogar, las dunas no constituyen una discontinuidad de hábitat. Para los especialistas del hábitat, las dunas corresponden a ambientes inhóspitos en donde la fauna incursiona como elementos transientes. Las variaciones en la composición faunística latitudinal de las dunas reflejan reemplazos biogeográficos que obedecen a otros factores causales. Para los vertebrados de hábitos subterráneos, comportamiento sedentario, o de vagilidad restringida, las dunas no estabilizadas pueden sobreponerse a sus hábitats, convirtiéndolos eventualmente en elementos faunísticos permanentes, sujetos desde entonces a nuevas presiones selectivas.
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Gallardo, M. (1992). Las dunas litorales chilenas y su macrofauna acompañante. Bosque, 13(1), 49–52. https://doi.org/10.4206/bosque.1992.v13n1-06
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