Tradicionalmente las emociones han tenido un papel muy discreto en la escuela y la afectividad en el aula se ha hecho presente de manera desprovista en las relaciones de maestros y estudiantes. Con todo y lo anterior, desde que Salovey & Mayer (1990) utilizaron por primera vez el término de inteligencia emocional (IE) en una revista académica, el número de investigaciones y hallazgos respecto a la relación de la IE con diferentes conductas, con el éxito de la vida y con el rendimiento académico entre otras, han generado importantes avances permitiendo un nuevo posicionamiento de los programas de gestión emocional en las instituciones educativas. Hay que advertir que diversas disciplinas como la psicología, la neurociencia afectiva, el budismo y la educación, han dado relieve a las emociones y su incidencia en el desarrollo social y humano. Por esta razón se pueden evidenciar diversas experiencias exitosas en distintos contextos educativos que se han nutrido de estos hallazgos, sugiriendo además, una especial atención para el desarrollo de habilidades emocionales en los docentes en formación.
CITATION STYLE
Buitrago Bonilla, R. E., & Herrera Torres, L. (2013). Matricular las emociones en la escuela, una necesidad educativa y social. Praxis & Saber, 4(8), 87. https://doi.org/10.19053/22160159.2653
Mendeley helps you to discover research relevant for your work.