En vez de hablar despectivamente del mundo de las sectas desde un desconocimiento generador de miedos y conducente a la estigmatización, se propone una aproximación más serena al análisis de las organizaciones religiosas basada en una voluntad de comprensión. Se trataría de no absolutizar el valor de la abundante literatura sociológica sobre los fenómenos sectarios, sin dejar de reconocer su enorme interés histórico, en el doble sentido de que nos permite comprender la evolución de muchas organizaciones religiosas en el transcurso de los últimos siglos y de que puede aportarnos elementos útiles para la comprensión de muchos movimientos religiosos actuales. En lugar de pretender definir cuáles de esos movimientos son sectas y cuáles no, habría que tomar como punto de partida las distintas características atribuidas a los grupos sectarios, para examinar en qué medida se dan en todas y cada una de las organizaciones religiosas
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Estruch, J. (2002). El mundo de las sectas. Arbor, 171(676), 803–817. https://doi.org/10.3989/arbor.2002.i676.1064
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